La Cuarta accedió a acusación reservada de Roxana Muñoz.
En un verdadero escándalo se transformó la última jornada del exitoso reality Año Cero, de Canal 13. La ex Conejita Roxana Muñoz formalizó una denuncia de carácter resevado en la Subcomisaría de Carabineros de Quintero por el supuesto delito de abuso sexual en contra de su compañero de encierro, el musculín Cristián Menares, a la que La Cuarta accedió en exclusiva.
Según averiguamos con fuentes allegadas al caso, todo se inició la noche del martes pasado. El grupo de "sobrevivientes" (los ocho de la etapa final más Tanza Varela) realizaron un carrete en el Hotel Mantagua, lugar donde los cabros se prendieron más que una tevé de conserje.
Claudio Valdivia y Cristián Menares eran los más chacoteros de la jornada. Aunque los finalistas se viraron a dormir, el otro lote siguió con el brillo.
Durante buena parte del reality, la sensual Roxana Muñoz coqueteó de lo lindo con Menares, quien a sus 29 años es personal trainer. Cerca de las 3 de la madrugada del miércoles todo iba como avión. Sin embargo, Cristián se despegó del grupo y partió detrasito de la ex chica Playboy.
La voluptuosa morena dormía como una osita en una de las cabañas que arrendó la producción del canal. Lo que pasó después entre ambos formará parte de una investigación producto de la denuncia que chantó la ex Conejita.
"Existe una denuncia por el supuesto delito de abuso sexual, la que fue enviada a la Fiscalía", explicó el capitán Rodrigo Mejías a cargo de la Subcomisaría de Carabineros de Quintero. El mismo oficial no entregó más detalles por tratarse de una tema reservado, no obstante, el diario pop se las arregló para acceder a la pulenta del caso.
Según la denuncia de carácter reservado, cerca de las 21 horas del miércoles llegó a la Subcomisaría de Quintero Roxana Muñoz, quien se identificó como una concursante del reality.
La chiquilla se veía muy nerviosa y afectada emocionalmente, según logramos averiguar.
En su testimonio ante los funcionarios policiales de turno, la ex del pelotero Nicolás Canales contó que estaba durmiendo en una cabaña cercana a la discoteca Las Cabras cuando ingresó Menares.
Tras las supuestas tocaciones e intentos de besuquearla, la chiquilla se despertó y recibió un empujón de parte del musculín al rechazarlo.
Por tratarse de un tema delicado y estar bajo contrato tevito con la estación 33 por ciento católica, ella pidió confidencialidad en el caso, de allí que quedara como una denuncia de carácter reservado.
Sin embargo, la mujer no tuvo lesiones que permitan acreditar al menos en esta instancia, el supuesto abuso. Además, realizó la denuncia 18 horas después de perpetrados los supuestos hechos.
En todo caso, el mismo día de la denuncia los verdes entregaron un cuaderno rservado con el informe policial al fiscal de Quintero, Mauricio Dünner, quien está analizando si es que existen antecedentes para acusar a Menares por el delito de abuso sexual.
La noche de la final la ricura se anduvo escondiendo del acoso y sobre la denuncia sólo dijo: "No la niego". Ayer, al conocer que existe una investigación y los detalles del tema, intentamos contrastar con ella directamente los antecedentes, pero a través de su representante Rodrigo Mena, no obtuvimos resultados.
Mientras que de Cristián supimos que estaba muy afectado y en compañía de amigos y familiares. También lo ubicamos al celu, pero el musculín no quiso entregarnos su versión.
Por su parte, Canal 13 decidió proporcionarle ayuda jurídica a Roxana Muñoz, quien decidió emprender las acciones legales por sus medios.
Según fuentes de la estación, Cristián Menares no ha establecido contacto con ellos hasta ahora con el fin de hacer saber su situación personal y judicial sobre el caso.
LA OPERACIÓN PARA ENCUBRIR EL ATADO Y NO EMPAÑAR LA GRAN FINAL...
Durante la finalísima del miércoles en Calera de Tango, todos se preguntaban por qué Muñoz y Menares eran los únicos semifinalistas ausentes.
Pero antes de la medianoche, la producción de Canal 13 metió a la preciosura bien fondeada y custodiada.
Roxanita recién se hizo presente en la zona de competencia para la final de varones, llamando la atención su rostro alicaído y ánimo bajoneado. Sacó la voz únicamente para gritar apoyando a Frank Lobos.
Sentada al lado de su amigui Lucky Buzzio (Pichulotote), causó extrañeza como la producción la sobreprotegía y quienes la saludaban parecían consolarla y entregarle apoyo. Una vez finalizado el cocido fue cuando el equipo se enteró de que algunos medios ya estaban consultando sobre la acusación en la conferencia de prensa. La agarraron de un ala y la llevaron a su auto evitando que pudiera hablar con los medios. Todo para pasar piola en la final.
No hay comentarios:
Publicar un comentario